Nuestros hijos son mucho más que nuestros hijos, pues ellos no son niños, pueden tener mucha más “edad y evolución” que muchos de nosotros. Ellos, como nosotros, al venir a manifestarse a este plano necesitan un cuerpo que les sirva para expresar y compartir sus talentos. Entonces eligen quiénes serán sus padres. Si las familias supiéramos más de educación, sabríamos que nuestros hijos no son menos ni más que nosotros, viviendo aprenderán lo que necesiten, no los tenemos que “domesticar”, pueden venir de otras dimensiones con un gran bagaje de experiencias, vienen a ser ellos mismos, necesitan tiempo para desarrollarse, adquirir potencia y capacidades. No tienes que creer todo lo que aquí digo, escucha y siente qué dice tu corazón, no tu mente, haz tu propia experiencia.

Las tradiciones espirituales nos dicen que cuando decidimos encarnar en el plano humano es para vivir varias vidas físicas. Y acá te decimos que cada vez que re-encarnamos el que viene elige quienes van a ser sus padres, y los padres eligen cómo llamarán a ese niño. Él ha elegido a esos padres sabiendo muy bien lo que hacía, pues no lo ha hecho desde el plano humano, sino desde una dimensión con una perspectiva mucho más amplia, mucho más consciente. Simplemente sé tú mismo, así como eres, y dale amor, todo el amor que puedas darle. Acompáñalo en su crecimiento.

 A esos padres que temen equivocarse en la educación y disciplina que imponen a sus hijos les digo: ¡Tranquilos!; Y si crees que tú no puedes haber elegido a tu padre, que era un pervertido, te digo sí, lo has elegido porque en este Universo, todo encaja perfectamente, todo tiene un sentido profundo que la mente no alcanza a comprender. Todo esto se aplica también a nuestros alumnos. Para percibir, no desde los ojos sino desde el corazón, “que todo encaja”, aconsejo el siguiente ejercicio bien práctico y sencillo:

Contempla el firmamento en una noche estrellada y despejada: y diles a las estrellas lo que la ciencia nos ha contado: “Acá estoy yo”, encarnado en un ser humano, uno entre los 8.000 millones de humanos, de esta especie, una de las “decenas de millones de especies y de formas de vida” que hay en el Planeta Tierra, que es un planeta que está girando sobre sí mismo a tan enorme velocidad que ni me doy cuenta. Y además está rotando alrededor del Sol, que es una estrella, que pertenece a una Galaxia, la Vía Láctea, que está formada por medio billón de estrellas, una de las cuales es el Sol. Este Sol, además, está viajando en una gran elíptica alrededor del Centro de la Galaxia. Y así podríamos seguir y seguir mucho más… Todo tiene su sentido profundo, su porqué y su para qué. Todo lo que sucede es perfecto y encaja a la perfección, aunque muchas veces nos parezca lo contrario. Es muy bueno reírse, y más si uno se ríe de uno mismo.