¡TODO ES PERFECTO! (Con citas de Sri Sri Raví Shankar)

La vida no existe sólo en nuestro cuerpo, hay vida en el espacio entre nosotros, en el espacio entre todos. Necesitamos ser como niños, para los que todo consiste en jugar. Podemos tener la seguridad de que lo que el “Universo” haya previsto para nosotros, eso es lo que tendremos, seguros de que ¡TODO ES PERFECTO” .

Y si nos sentimos atados por tantos compromisos, esas ataduras  también podemos saber con seguridad que pertenecen a nuestra mente. Los compromisos los creamos nosotros mismos. Es la mente, el ego, la personalidad que creamos, siendo niños, copiando a nuestros mayores, la que compite, pelea y discute. ¿Para qué seguiríamos cargando con ella?

Una mente en paz es ecuánime, se mantiene en su centro. El deseo de tener fama, belleza, talentos, riquezas, etc.; nos sacan de nuestro centro, nos debilitan y llenan de ansiedad. Para ser alguien centrado y fuerte hemos de prescindir de estos tipos de deseos.

Impaciencia significa: “llenos de avidez”. La paciencia nos llegará cuando erradicamos toda esa avidez. Allí donde ponemos el centro de nuestra atención, eso crece. Por lo tanto no te centres en lo que te falta, en lo que no tienes y enfócate en todo lo que ya posees, en la abundancia de todo lo que existe a tu alrededor, para que eso sea lo que crezca, y así sabrás que ¡TODO ES PERFECTO!

Ya todos sabemos que no debemos “juzgar”, pues no queremos ser juzgados, pero seguimos juzgando a los demás, con razones justificadas, ¡por supuesto! Allí perdemos nuestra inocencia, eso mismo se refleja como un espejo en nosotros y por eso perdemos la inocencia.

Yo me pregunto: ¿Qué es lo que deseo, lo que más busco en esta etapa de mi vida? Quiero un florecimiento espiritual, florecer en todas las dimensiones posibles, desbordar felicidad y sentirme a gusto con quien yo soy y con todas las personas que tenga alrededor; mis familiares y amigos más cercanos. Quiero además aprender a valorar a quienes están conmigo.